Rehabilitación de suelo pélvico: posible e importante
Embarazo, parto, obesidad e, incluso, tos crónica, pueden provocar lesiones en los tejidos del suelo pélvico. Pero es posible prevenir y tratar los problemas de esta zona. Por eso, hoy hablamos sobre rehabilitación de suelo pélvico con Marta Jerez Sáinz, diplomada y graduada en Fisioterapia, especialista en Pelviperineología y Rehabilitación postquirúrgica en mujer y varón, y directora del Instituto de Rehabilitación y Uroginecología de Málaga (IRU Málaga).
¿Qué es la rehabilitación del suelo pélvico?
La rehabilitación de suelo pélvico es la estabilización de la pelvis con el objetivo de mantener una óptima tensegridad (un concepto arquitectónico que en fisioterapia nos sirve para hablar del equilibrio entre tensión y elasticidad) y una dinámica sexual, miccional y defecatoria correcta.
Habitualmente el paciente llega perdido a la consulta. En la gran mayoría de los casos ha hecho ejercicios Kegel o con bolas chinas, pero sin haber sido sometido a una valoración inicial ni recibir una guía de tratamiento evolutivo. Estos pacientes suelen acabar peor que empezaron: sin rehabilitar y con más síntomas de los que tenían.
Por eso, es fundamental basar la rehabilitación del suelo pélvico en una evaluación inicial en la que se determina la frecuencia necesaria de las sesiones, la aparatología que se precisa , así como las fases y el tiempo de tratamiento que debe dedicarse para conseguir la estabilidad que va a evitar su recidiva.
¿Por qué es importante rehabilitar esta zona y en qué casos se recomienda?
La rehabilitación de suelo pélvico debería comenzar desde la niñez, que es cuando comenzamos a adquirir malos hábitos que afectan a los órganos, músculos y tejidos del suelo pélvico. Me refiero a esas escenas habituales cuando se insta a un niño a no hacer pis o caca y que aguante hasta llegar a casa. También mantenemos malos hábitos cuando crecemos y seguimos una mala alimentación, practicamos deporte con una mala técnica de ejecución, conducimos muchas horas, pasamos largas jornadas sentados o volvemos a “aguantarnos” las ganas de orinar o defecar hasta volver a casa por no ir al baño en el trabajo.
Así acaban lesionándose la parte neuromotriz y los sistemas de sujeción de vejiga, utero, prostata y ampolla rectal. Cuando se es mayor están tan desestabilizados los órganos del suelo pélvico que no se siente deseo miccional ni defecatorio hasta que la orina sale por incontinencia a un mínimo esfuerzo.
¿Cuáles son las principales técnicas de rehabilitación del suelo pélvico?
En el Instituto de Rehabilitación y Uroginecología de Málaga tratamos el suelo pélvico como parte integrada en un sistema miofascial. De esta forma abordamos cada caso teniendo en cuenta las cadenas miofasciales implicadas en el desarrollo de la disfunción del paciente.
Con el tratamiento miofascial trabajamos para que el paciente tenga la óptima tensegridad del suelo pélvico. Siguiendo un protocolo de evaluación, realizamos hacemos tests miofasciales y palpatorios y, además, con nuestro equipo Phenix vemos si existe disfunción neuromotriz y/o miofascial y orgánica, sumando a la prueba una valoración de ecografía con elastografía.
¿Qué aporta la tecnología a la rehabilitación del suelo pélvico?
Aporta una valoración objetiva, además de una fórmula comparativa exacta de evolución entre las diferentes sesiones y el final del tratamiento.
Si quieres saber más sobre rehabilitación de suelo pélvico y sobre el trabajo de Marta Jerez Sáinz en IRU Málaga, visita su web.